Los polvos de talco después del baño absorben muy bien la humedad y previenen la aparición de las erupciones y las rojeces en las zonas de mayor fricción. El aceite orgánico de Lavanda calma la piel. El extracto orgánico de Tomillo posee propiedades antisépticas.
Forma de uso: Aplicar los polvos de talco sobre la piel del bebé después del baño prestando mayor atención a las zonas de los pliegues. Retirar con cuidado el producto sobrante. No permitir que los polvos de talco se introduzcan en las vías respiratorias.